Esta es una traducción de la transcripción del original por Lisa Littman:
Hay una especie de excepcionalidad en todo lo relativo a la identidad de género: si toca la identidad de género, entonces ninguna de las reglas del ser humano aplica.
Por ejemplo: sabemos lo que los niños pequeños son capaces de comprender sobre sí mismos y sobre el mundo. Y, normalmente, no tomamos lo que dice un niño de dos años literalmente.
Sin embargo, las personas que realmente promueven la vía de transición médica afirmativa piensan - oh, si se trata de género, los niños de pronto son como estos diminutos sabios mágicos. Pueden equivocarse sobre Papá Noel, el Conejo de Pascua y todo lo demás, pero si se trata de su género, están al 100% en lo correcto.
También conocemos a los adolescentes: los adolescentes están en pleno desarrollo, y en el epicentro de su desarrollo está la exploración de distintas identidades y averiguar dónde encajan en el mundo. Y es natural que los adolescentes puedan equivocarse en algunas cosas. No siempre están al 100% en lo cierto.
Sin embargo, algunas personas que están promoviendo mucho el enfoque afirmativo y el enfoque del consentimiento informado dicen, está bien, sí, los adolescentes hacen esto, exploran, se equivocan... excepto cuando se trata de género, porque ¿por qué harían eso sobre el género?
Y es así como sacamos el género del contexto de todo lo que sabemos sobre los seres humanos para colocar la identidad de género en un pedestal y confirmar que esta es la forma en que deberíamos tratarlo.
Dra. Lisa Littman